jueves, 21 de julio de 2011

EL CRIMEN MÁS ANTIGUO *



La fuerza de sus ganas



sólo se compara con el paso detenido



de un río en creciente



es como si el más incontenible remolino



naciera del fondo de sus entrañas



demoliendo toda seña de razón,



es la bestia roja y ciega



que posee su cuerpo



jadeante y primitiva



y que enloquecida



brama sin descanso, hambrienta



anunciando su luna llena



esperando dar inicio a su batalla de honor



pues sólo eso le dara sentido



a su origen y ser,



si, su potente reclamo es un reto



para ese otro animal



y de esta manera, si responde, salvajes



enfrascarse en la lucha más sublime



que ha podido conocerse,



aquella lid carnicera



que sólo busca



la pequeña muerte.

(*El título es una frase de Nabokov)